Los funcionarios calificados como evistas comenzaron a ser retirados desde diciembre, entre ellos cuatro gerentes regionales de Entel. Ven si participan en eventos de Evo y les someten a encuestas internas.
PAGINASIETE
El expresidente Evo Morales, diputados y dirigentes masistas denunciaron que el actual Gobierno comenzó una purga a fin de eliminar a los funcionarios públicos “evistas”. Entre los retirados están cuatro gerentes regionales de Entel, entre otros. Si participan en las concentraciones del jefe del MAS, en encuestas “engañosas” o simplemente defienden a la exautoridad son retirados de sus cargos. Desde el Gobierno rechazan estas denuncias y aseguran que si se alejó a alguien, se debe a la ineficiencia o un “atisbo” de corrupción.
La primera denuncia la hizo el propio Morales al advertir el alejamiento de Iván Canelas de la gerencia de la telefónica estatal Entel por haber asistido a su celebración del 18 de diciembre, cuando recordó su primera victoria electoral. “Por evista, Iván Canelas fue despedido de Entel Cochabamba. Él no es evista, es masista, y como tal no se somete al (vicepresidente David) Choquehuanca ni al (presidente) Lucho. Ni le dejaron sacar sus cosas. Iván estaba en la concentración”, manifestó.
El Movimiento Al Socialismo (MAS) atraviesa por una crisis interna y sus dos principales líderes —Morales, presidente del partido, y Luis Arce, jefe de Estado— se ven enfrentados por denuncias de narcotráfico, corrupción e incluso de traición al instrumento político. Ahora, esta pugna llegó a mandos medios y funcionarios del aparato estatal de Gobierno.
El secretario político nacional del MAS, Froylán Fulguera, dijo que desde la concentración de diciembre “hay denuncias que funcionarios han sido retirados”, pero aclaró que “oficialmente” no conoce de casos particulares. “Esas denuncias se van a corroborar en los departamentos (con personas que afirmarán) que se están agarrando con los nuestros (los evistas)”, indicó.
El dirigente político aseguró que “algunos ministros” no son del “proceso de cambio” y ni siquiera están inscritos en las filas del MAS. “En ese sentido quieren agarrarse con nuestra gente. Pedimos que recapaciten. La familia del proceso siempre actuó en solidaridad y complementariedad, no cómo lo están haciendo”, señaló a Página Siete.
La primera forma de identificar a los evistas fue expuesta por Morales. “(Hubo una) instrucción desde el Gobierno: funcionarios, no vayan a la concentración (de diciembre). Compañeras, jovenzuelas, que trabajan en instituciones públicas me informaron que (las amenazaron): ‘Si vas, pierdes el trabajo’ y para participar se pusieron polleras”.
La exautoridad agregó que otros funcionarios asistieron a su concentración con gorras, gafas y barbijos para no ser identificados. “El presidente del MAS de Tarija, Carlos Acosta, me informó que el sábado en la noche venía un bus con funcionarios. Llamada telefónica, vuelvan. Algunas compañeras llorando retornaron”, relató.
El diputado por el MAS y afín a Morales Héctor Arce aseguró que los despidos continuaron. “Por la presión de algunos jefes de bancada que son renovadores hay una instrucción desde el Ejecutivo: destituir a todos los servidores públicos que sean cercanos a Evo Morales, que hablen de Evo Morales o defiendan a Evo Morales”, sostuvo.
El legislador afirmó, por ejemplo, que el 17 de enero se llevó a cabo la reunión política de todos los martes, en la que participaron el presidente Luis Arce, el vicepresidente David Choquehuanca y el viceministro Gustavo Torrico.
“Se les salió y no se dieron cuenta; los jefes de bancada de Oruro y Potosí le reclamaron enérgicamente al presidente Lucho y le preguntaron: ‘¿Por qué hasta la fecha no se han destituido a todos los evistas de las instituciones? Ese fue el reclamo formal en la reunión donde participaron los nueve jefes de bancada del MAS. (Nos enteramos) porque la única bancada que no fue captada por los renovadores es la de Cochabamba”, apuntó Arce y agregó que el 7 de febrero la bancada de Cochabamba fue excluida de las listas de participar de estas reuniones.
El legislador declaró que en Cochabamba, departamento por el cual es representante, “todos los evistas están siendo destituidos de los niveles jerárquicos y también funcionarios de bajo rango. Por ejemplo: de Vías Bolivia el evista muy reconocido Esteban Ramírez fue destituido; del Segip el (compañero) muy cercano a Evo, Rimer Agreda, fue destituido; de Redes de Gas, Zabaleta también de la gestión de Evo Morales fue destituido; de Entel Iván Canelas, exgobernador muy cercano a Evo Morales, fue destituido; de Emapa, Mari Laura, muy cercana a la gestión de Evo, fue destituida”.
Aseguró que en estos dos meses se produjeron todas esas destituciones por instrucción del Órgano Ejecutivo. “Los funcionarios de rango bajo, a diario, son destituidos sin ninguna consideración o contemplación, considerando que es gente que trabajó, que hizo campaña, pero de manera abusiva los renovadores tomaron la decisión de destituirlos”, manifestó.
Además, otra forma de identificar a los “evistas” es por encuestas engañosas. “Mi persona recomendó a un compañero de provincia y lo destituyeron. Le hicieron una encuesta supuestamente evaluando a los funcionarios. En ella preguntaron: ¿‘si mañana fueran las elecciones, por quién votarías? ¿Por Lucho o por Evo? Todos los que dijeron por Lucho se quedaron y uno de los funcionarios respondió que Lucho es nuestro presidente, tenemos que garantizar su gestión y el hermano Evo es nuestro líder nacional. Al día siguiente lo destituyen”.
Hace un par de semanas, Radio Kawsachun Coca, en la que el exdignatario transmite su programa dominical, reportó el retiro de cuatro gerentes regionales de Entel que fueron “elegidos orgánicamente por las organizaciones sociales para cumplir este rol. Están siendo despedidos por ser ‘evistas’, por asistir a concentraciones donde estaría participando el hermano Evo”.
La tarjeta de registro de Entel dice que entre el 23 de diciembre y el 9 de enero los gerentes regionales de Oruro, Pedro López; de Chuquisaca, Víctor Grájeda, y de Cochabamba, Iván Canelas, fueron removidos del cargo.
El 11 de noviembre también se alejó del cargo al gerente regional de Pando, Johny Laura. Además, el 23 de diciembre establece el ingreso al directorio de Héctor Ramírez y Leyla Medinaceli como presidente y secretaria de la firma.
Respuesta del Gobierno
El diputado evista Arce apuntó al viceministro Torrico como “el autor de este atropello”. Sin embargo, la autoridad de Gobierno negó las acusaciones y, por el contrario, las calificó de “falsas”.
“Nosotros somos un movimiento político muy grande. Si bien hoy está conduciendo el país el compañero Luis Arce con David Choquehuanca, no es menos cierto que nuestro presidente del MAS, Evo Morales, es el conductor de la revolución y del proceso de cambio”, dijo.
“Si hablan de que estamos despidiendo a los compañeros evistas o afines a Evo, el primero en irse debería ser mi persona. Vengo desde mucho más antes (trabajando), tenemos ministros que vienen desde el tiempo del gobierno de Evo, tenemos funcionarios que en esos tiempos estaban a cargo de direcciones y ahora fueron promocionados a ministerios”, aseguró.
Respecto al cambio de Iván Canelas en Entel, Torrico aseguró que esos son puestos de “libre disponibilidad” de un Presidente. “Sus motivos debió tener y no podría decirles cuáles habrían sido, pero hubo razones para su despido, pero eso no quiere decir que se retiró a gente evista. Ahora, (si) se despide alguna gente de algunos lugares (es) por ineficiencia, hechos que se pudieron dar, incluso, atisbos de corrupción. Ese es otro tema. De ahí que se quiera mencionar que se retiran porque son evistas, eso es una falacia”, insistió.
Torrico descartó que hubiera una crisis interna en el partido de Gobierno. “Tú ves que no hay una dirección nacional alterna; no existen direcciones departamentales paralelas, no hay una división de las direcciones regionales, distritales y barriales alternas. El MAS está compacto en todas sus filas”, dijo.
Pese a ello reconoció que “arriba”, a partir del presidente Morales hay algunas críticas. “Son hechos que se dan y es un tema político que nadie puede evitar ni soslayar. Los legisladores, como manda la Constitución, tienen la tarea de fiscalizar. Creo que eso no puede considerarse como división”.
El analista político Marcelo Arequipa consideró que en la burocracia se instaló una suerte de trabajo militante, político e ideológico y no tanto una noción de servicio público.
“Eso sucede en todos los niveles: en alcaldías y gobernaciones también vemos esta dinámica. Si se trata de hacer una buena gestión, se necesita gente y técnicos que operen profesionalmente. Esas líneas son distintas, obviamente, a las del expresidente Evo Morales. Por ahí tiene su explicación”, sostuvo al ser consultado sobre el tema.
Comentarios