Cuatro municipios de Tarija reportan un elevado índice de pobreza.

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El municipio de Entre Ríos, Uriondo, El Puente y Padcaya reportan la mayor incidencia de pobreza en el departamento de Tarija, según datos del Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), documento elaborado en 2019 entre la Gobernación de Tarija, la Fundación ARU y el Programa de las Naciones Unidad para el Desarrollo (PNUD).

El IPM que recoge los indicadores de empleo, infraestructura y acceso a servicios, derechos humanos y proyección social, educación, salud y alimentación en los 11 municipios del departamento, da cuenta que existe una marcada diferencia en la incidencia de pobreza entre el campo y ciudad. El área dispersa reporta un 54.69% y el área urbana solo el 20.51%.

Mientras, las incidencias más altas, en cuanto a privaciones, ubica a Entre Ríos con el 50,32%; Uriondo con 49,09%; El Puente con 48,77% y Padcaya con el 46,49%, Yunchará con el 36.52%, Villa Montes con el 33.68%, San Lorenzo con 31.37%, Bermejo con 29.28%, Caraparí con 29.3%, Yacuiba con el 26.06% y Tarija con el 20.99%.

Entre otros datos, el IPM refleja que el subempleo en el departamento es de 55.76%, los hogares privados de la tenencia de activos están por el 47.82%, el acceso a servicio de cuidado (infantil y de ancianos) 42.47%, los años de escolaridad 31.07% y la prevalencia a la subalimentación 30.67%.

En ese contexto, el gobernador de Tarija Adrián Oliva señaló que el Plan Operativo Anual (POA) 2021 estará orientado a superar las diferencias asimétricas y las brechas que existen en el departamento para avanzar de manera más equilibrada hacia un desarrollo integral.

Sin embargo, indicó que el índice de pobreza de algunos municipios es un “llamado de atención” porque refleja una situación crítica a pesar de la cantidad de ingresos que recibió el departamento en el pasado, pero que no se logró invertir de forma adecuada para generar desarrollo.

“Con este Índice de Pobreza Multidimensional o el Índice de Progreso Social que también se ha elaborado como Gobierno Departamental, está claro que las inversiones no han estado dirigidas a enfrentar o atender las prioridades que tenía la población y por eso no han resuelto muchos problemas que todavía arrastramos”, manifestó Oliva durante la presentación del documento.

Explicó que, entre las acciones concretas a corto plazo para reducir los índices de pobreza, en la fase post- pandemia, se contempla dos programas; la sustitución de leña por gas para más de 18 mil hogares de familias campesinas y alimentación complementaria para más de 100 mil niños.

“Estamos tomando decisiones para poder llevar adelante los cambios que requisen el departamento, además de hacerlo con equidad, pensando en la justicia social y en los que más necesitan, en los que menos tienen, no solo desde el punto de vista material sino para aquellos que están carenciados de una serie de aspectos que el Estado debe proveer”, argumentó.

Agregó que los datos del IPM fueron la base para implementar medidas durante la pandemia, como el bono Jefa de Hogar, que llegó a más de 23 mil mujeres, que son padre y madre.

Agenda Global 2030 con un nuevo modelo de desarrollo

En función a los datos del Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), el secretario de Gestión Institucional de la Gobernación de Tarija, Rubén Ardaya, informó que el Gobierno Departamental elaboró la Agenda Global 2030, con fundamentos y herramientas hacia un nuevo modelo desarrollo que se prevé aplicar desde la gestión 2021, con énfasis en una alianza público-privado.

Explico que los datos del IPM son la base de la nueva política departamental para los próximos 10 años. “Nos marca desde qué punto de partida estamos saliendo, los nuevos desafíos y los modelos de desarrollo del departamento, que tiene como objetivo central la erradicación de la pobreza extrema y la reducción significativa de la pobreza moderada (…)”.

Para Ardaya, los nuevos objetivos del departamento coinciden con el fin de una etapa de “economía rentista”, debido a la caída de precios de los hidrocarburos en el mercado internacional y pandemia del Covid-19, que marcan un fuerte impacto en la economía del departamento.

En ese sentido, apunta que la nueva estrategia de desarrollo que debe implementar Tarija con mucho rigor es la articulación vertical entre los niveles de gobierno, nacional, departamental y municipal, además de la participación de privados. “Fundamentalmente el nuevo modelo tiene que basarse en lo que significa las alianzas pública-privada, lo que implica darle el rol en materia de desarrollo al sector privado”, detalló.

Es así que la Gobernación ya elaboró el plan de reactivación económica y el plan de diversificación productiva, que tienen como nuevo patrón de desarrollo la economía e industrialización de productos de alto valor, basado en la alianza público-privada.


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