Las personas que no tienen muchos aportes a las Administradoras de Fondos de Pensión (AFP) o que quedaron cesantes antes del inicio de la pandemia buscan recuperar el dinero que les descontaron para alimentar sus jubilaciones, además de ser un aporte solidario.
Shirley Amonzabel es una tarijeña de al menos 40 años y busca recuperar las contribuciones a la AFP que realizó durante ocho años en los que trabajó en una empresa, posteriormente se dedicó a realizar diversas labores, pero ya nunca más aportó y considera que es un dinero que está guardado sin ningún beneficio.
“Ahora que estoy sin trabajo es necesario ese dinero para poder sostener a mis hijos, a mi familia, tengo bajo mi cargo a mi madre que es de la tercera edad y necesita ayuda, yo ya no podré cumplir con los aportes para mi jubilación y ahora necesitamos comer, comprar medicamentos y otras necesidades”, sostuvo.
Apuntó que es un pedido justo, asegura no querer un bono, solo pide que le devuelvan su dinero porque si no lo recupera es un monto que “quedará en nada”. “Nadie puede trabajar gratis, está por demás cuestionado el destino de los aportes por los malos manejos, pareciera que ya no están”, reclamó.
Investigación
Criticó que el Gobierno no realice una investigación o asuma una posición al respecto, señaló que “todo lo resuelven callándose, ¿dónde está nuestra plata?, nadie dice nada, se hacen a la vista gorda, es un robo que se lo hayan sacado nuestros aportes”, protestó.
Por su parte, Alberto Gutiérrez, que tienen 68 años, indicó que retirar las contribuciones a las AFP puede convenir a las personas jóvenes, que aún no acumularon lo suficiente para jubilarse, pero para las personas mayores no es lo recomendado porque perderían la renta que les toca porque ya no están en condiciones de trabajar y les supone una ayuda.
“Yo aporté durante 30 años, entonces no me conviene retirarlo, recibo algo más de dos mil bolivianos mensuales, retirarlo sería un desperdicio, no es conveniente, me quedaría sin jubilación”, argumentó.
A su turno, Franz Rodríguez, que realizaba el trámite de declaratoria de herederos ya que falleció su esposa, dijo que en su criterio personal no corresponde la devolución de las contribuciones porque se trata de un aporte solidario que realizan los que trabajan para garantizar la renta a futuro.
“Tampoco me parece correcto que se haga mal uso de los aportes que hicimos durante tantos años, debemos merecer un tratamiento especial y sancionar a los culpables que se llevaron ese dinero, no pueden quedar impunes quienes hicieron uso de nuestros aportes a las AFP”, señaló.
APOYO
Por la devolución de las contribuciones
El vicepresidente del Movimiento de Emergencia Nacional por la Devolución de los Aportes a las AFP en Cercado, Orlando Bejarano, apuntó que la gente está “respondiendo bien” respecto a esta acción que les permitirá recuperar el dinero que les descontaron para su jubilación.
Subrayó que mediante la recopilación de firmas buscan impulsar una ley que les permita acceder al dinero que contribuyeron a las AFP, pero el retiro es voluntario, no es necesario que las personas se sientan obligadas a hacerlo una vez que la norma se apruebe.
Indicó la iniciativa nació apenas empezó la pandemia del coronavirus, la gente ya no contaba con mucho dinero, otros se quedaron sin trabajo y por esta razón se pide la devolución de los aportes, pero es de manera voluntaria. “Si las personas no desean hacerlo, pues no lo retiran y pueden seguir aportando normalmente y recibir su jubilación de la misma manera”, explicó.
Recordó que cuando la persona inicie su trámite de jubilación, debe acumular 120 aportes y cumplir 58 años, el monto de dinero se lo divide en 110 años, la suma resultante es lo que recibirá como renta mensual.
“Lo que planteamos es la devolución del 100 por ciento para quienes tengan 100 mil bolivianos o menos – detalló -, quinees tengan una cifra superior a ese monto podrán retirarlo por escalas y si quieren seguir aportando, pueden hacerlo si lo creen conveniente”. Agregó que de acuerdo al salario percibido como mínimo le descuentan unos 500 bolivianos y pasados los cinco años esta cifra se incrementa, de acuerdo a los años trabajados.
ElPaís.
Comentarios