Una convocatoria hecha por el MAS para tomar las rotondas del segundo anillo en la capital cruceña derivó en un enfrentamiento, primero con ciudadanos que rechazaban su iniciativa y luego, entre este último grupo y la Policía.
Al respecto, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, calificó lo ocurrido como un «conspiración contra la democracia» que tiene la intención de que la gente no participe de las elecciones generales del próximo 20 de octubre en el país.
Considera que hay grupos de «fascistas disfrazados» de cívicos y políticos de derecha radical, que han tejido una estrategia para que haya brotes de violencia y que lo que buscan es «un muerto» para que luego salgan y digan que hay dictadura y así «echarle la culpa al Gobierno, a Evo Morales, que se están matando cruceños», dijo a Bolivia TV.
Sobre lo ocurrido la tarde de este jueves, informó que hay al menos ocho personas heridas, una mujer un menor de edad y seis policías.
En el caso de la mujer y el niño, ellos estaban, según informó Romero, en el interior de la casa de campaña del MAS, que está sobre el segundo anillo y avenida Beni, que fue asaltada por el grupo de manifestantes.
Campesinos se dirigen a la capital cruceña
Para este viernes se tiene previsto que la marcha que salió hoy (jueves) desde Pailón, llegue a la capital cruceña. Los campesinos, afines al Movimiento Al Socialismo, han anunciado que tomarán el edificio de la Gobernación.
Lo que piden es que se abrogue la Ley de Declaratoria de Pausa Ambiental que prohíbe los asentamientos en las zonas que fueron afectadas por los incendios en la Chiquitania.
El presidente del Comité Cívico Cruceño, Luis Fernando Camacho, exhortó a la población a evitar cualquier tipo de enfrentamiento con los miembros de la marcha.
También pidió a la Policía y al Ministerio Público que se apersone al cuarto anillo de la avenida Virgen de Cotoca y persuada a los caminantes para que no continúen con su medida y así evitar cualquier contingencia.
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