El ministro de Economía, Luis Arce, informó el sábado que el diálogo sobre el incremento salarial 2019 entró en un cuarto intermedio a solicitud de la Central Obrera Bolivia (COB), cuyos dirigentes pidieron mejorar la contrapropuesta gubernamental de subir un 2,5% al salario básico.
«Los compañeros han pedido un cuarto intermedio, por lo tanto, estamos en esa situación de cuarto intermedio con los compañeros de la COB para retomar mañana o el lunes el tema en la mesa de negociones», dijo en conferencia de prensa al final de una reunión entre ambas partes.
La COB planteó, en su pliego petitorio entregado al Gobierno, un incremento de 12% al salario básico y 10% al mínimo nacional.
«Al respecto, nosotros hemos observado que no lograron demostrar de dónde viene el 10 y 12 por ciento (…) y luego de varias discusiones el Gobierno ha hecho una propuesta, del 2,5 por ciento para el incremento básico y del cero por ciento sobre el salario mínimo nacional, como inicio del proceso de negociación», explicó Arce.
Además dijo que el Gobierno propuso a la COB un decreto supremo para que los trabajadores puedan acreditar en todo tiempo y en una cuenta única el crédito fiscal que crea el Régimen Complementario al Impuesto al Valor Agregado (RC-IVA).
«Se ha propuesto esto para que de esta manera ya no haya, como sucede actualmente, que cuando un trabajador cambia de fuente de trabajo y ha presentado sus facturas y tiene crédito fiscal, arrastre ese saldo favorable a su nueva fuente de trabajo. Es un decreto más que se aprobaría el 1 de mayo», señaló.
Arce aseguró, además, que habrá una reunión sobre el tema salarial entre la COB y el presidente Evo Morales.
Por su parte, el secretario ejecutivo de la COB, Juan Carlos Huarachi, hizo conocer su rechazo a la propuesta preliminar presentada por el Ministerio de Economía y dijo que el Gobierno debe mejorar el porcentaje del incremento a los sueldos.
«Esperamos que mañana o hasta el lunes podamos reunirnos otra vez y empezar a tratar el tema con una propuesta seria hacia los trabajadores, porque no podemos aceptar que se estén haciendo la burla con este tipo de propuestas y coincidiendo con algunas aseveraciones de los empresarios privados», manifestó.
Huarachi argumentó que el desarrollo y diversificación del aparato productivo nacional justifican, entre otros factores, mejores sueldos para los trabajadores.
«Esperamos una nueva convocatoria, porque estamos dispuestos seguir dialogando en beneficio de los trabajadores del pueblo boliviano», remarcó.
El salario mínimo nacional se incrementó de 440 bolivianos en 2005 a 2.060 bolivianos en 2018, ubicándose entre las mayores tasas de crecimiento de la región, según fuentes oficiales.
ABI
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