A ocho meses de los Juegos Suramericanos 2018, el Complejo Acuático de Cochabamba, construido como uno de los modernos escenarios del evento deportivo, se encuentra abandonado en medio de un panorama desolador.
El escenario deportivo, que en su momento fue elogiado por deportistas y medios de comunicación que participaron de los Juegos Suramericanos, ahora no tiene ni seguridad y cualquier persona puede acceder.
Según un reporte de la Red Uno, hasta las calaminas que forman un muro alrededor del Complejo se están cayendo y por medio de ese espacio se puede acceder sin ningún tipo de control.
El centro deportivo está rodeado de promontorios de hojas secas y malezas que en algunos sectores incluso alcanzan un metro de altura. Y cuando alguien desea acceder a las piscinas, también puede hacer sin control porque una de las puertas de vidrio está abierta.
El medio de comunicación que visitó el sitio informó que durante al menos una hora se buscó a algún encargado del lugar y nadie apareció, mientras se evidenció que hasta el agua de la piscina principal ya tiene un color verduzco.
Asimismo, todos los sectores del centro acuático están cubiertos de capas de polvareda y los baños no son la excepción porque, en algunos casos, hasta los inodoros están con materia fecal.
La Alcaldía de Cercado, según publicaciones pasadas de periódicos cochabambinos, destinó para la obra una inversión de 69.945.000 bolivianos.
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